El movimiento de indignados 15-M vuelve a llenar la Puerta del Sol
Miles de personas acuden a las concentraciones convocadas por movimientos asamblearios en varias ciudades
Gran despliegue policial en Madrid: decenas de agentes custodian la sede del Gobierno autonómico
En el manifiesto que han leído han aclarado a quién representan: "Representamos a parados, mileuristas, amas de casa, e inmigrantes, a ciudadanos en general". Y han explicado qué les mueve: "Creemos que la clase política vive lejos de la ciudadanía. Tenemos derecho a indignarnos". El portavoz ha asegurado que "hay cinco menores detenidos a los que no han soltado".
Afirman que otra política es posible y son contrarios al bipartidismo
A las ocho de la tarde varios centenares de personas concentradas en la Puerta del Sol han comenzado a silbar y aplaudir. Segundos después, los primeros cánticos contra el Gobierno y los partidos políticos. Cerca de los manifestantes, un gran dispositivo del Cuerpo nacional de Policía y de la Policía Municipal (una veintena de furgonetas), desplegados durante toda la jornada del martes en la plaza que acoge el kilómetro 0 y las calles aledañas. Barcelona, Valencia, Sevilla, Alicante, A Coruña, Vigo, Santiago y Palma de Mallorca son otras de las ciudades que acogen concentraciones de protesta.
Los portavoces de la plataforma Democracia Real Ya!, convocante de las manifestaciones del domingo que echaron a la calle a miles de personas en más de 50 ciudades de todo el país, hacían un llamamiento: “Cualquier que venga a formar gresca que se quede en casa”. Carlos Paredes de 31 años y autónomo, uno de sus representantes, se empeñaba en manifestar su rechazo a la violencia y aclarar que la concentración de esta tarde en Sol y en otras tantas plazas de España ha sido convocada por movimientos populares y asamblearios.
Un manifestante, Eduardo Revuelta, que también estuvo el domingo, comenta: “Más que indignados, ahora lo que estamos es ilusionados”. Y aclara que cuando demandan una democracia más participativa lo que esperan es que las protestas sirvan para “que los partidos abran las listas y se acabe la corrupción”.
La concentración de la madrileña Puerta del Sol ha reunido al menos entre 5.000 y 10.000 personas, según los cálculos de EL PAÍS. El método de recuento es el siguiente: la superficie de la plaza es de 10.000 metros cuadrados, la ocupación era al menos del 50% y había una o dos personas por metro cuadrado.
Sevilla ha acogido en la plaza de la Encarnación un millar de personas que se manifiestan por una “democracia real”. Un centenar se ha concentrado en la plaza del Obradoiro de Santiago, unas 50 en Vigo y una treintena en A Coruña. En Valencia, donde eran unos 300, muchos viandantes se detenían a interesarse por la movilización. “Otro mayo es posible”, se leía en un cartel; “Centrados en tu cartera”, en otro adornado con las gaviotas características del PP. En Alicante 150 personas se concentraron ante la subdelegación del Gobierno; dicen que se irán turnando en grupos de 19 hasta el día de las elecciones. “Esto es una protesta pacífica y no un botellón”, dicen sus portavoces. En Bilbao, hay 300 manifestantes en la plaza Arriaga, donde han leído un manifiesto de solidaridad con los desalojados de la Puerta de Sol. En Barcelona hay unas 200 personas. “Mi ilusión es que logremos cambiar algo, por eso aguanto”, resumía Helios P., de 27 años, parado desde marzo, que lleva desde el lunes en la plaza de Cataluña. Unas 300 personas protestas en Zaragoza. En Palma de Mallorca, 40 jóvenes hacen una sentada en la plaza de España, con la intención de permanecer hasta el 22-M. Una decena de activistas pasará la noche al raso.
Desalojados de madrugada
Sus miembros, a priori, no piden el voto para ningún partido pero tampoco llaman a la abstención
El desalojo de la Puerta del Sol de esta madrugada fue agitado. Acabó con una persona detenida y un policía herido. Los concentrados se vieron rodeados sobre las cinco de la mañana por la policía, que, sin contemplaciones, los condujo hasta la cercana plaza de Callao. Entre ellos, estaba el actor Alberto Amarilla. La operación policial, a la que inmediatamente ha seguido la aparición de operarios de limpieza municipales, ha durado unos diez minutos, durante los cuales los manifestantes han intentado, infructuosamente, llegar a un acuerdo.
Una avanzadilla de los desalojados ha acudido este mediodía a los juzgados de Plaza de Castilla de la capital, para apoyar la salida de los 19 detenidos en la manifestación del pasado domingo, además del detenido de esta madrugada. Mientras esperaban que terminaran de declarar un numeroso grupo ha desplegado sus pancartas y ha continuado con sus mensajes contra los partidos y la precariedad laboral.
14 detenidos en libertad
La manifestación del domingo dejó 18 detenidos. El desalojo del lunes en la Puerta del Sol con uno más. Uno de los portavoces ha asegurado en la concentración del martes que cinco de los arrestados, los menores, siguen detenidos. Los 14 restantes han sido puestos en libertad con cargos y sin medidas cautelares. La policía les acusa de desorden público y atentado contra la autoridad, según ha explicado Miguel Ángel Muga, abogado de uno de los detenidos.
Varias de las que han acudido a los Juzgados de Plaza de Castilla a recibir a los arrestados han impedido grabar la salida de los detenidos increpando a los periodistas y manchando con vaselina las cámaras de fotógrafos y televisión para inutilizarlas. La plataforma Acampada en Sol ha condenado estas agresiones. Han reiterado su "apuesta por los métodos pacíficos y su desacuerdo con prácticas violentas".
Miguel Diéguez, estudiante de 19 años de Derecho y ADE en la Complutense de Madrid, es uno de los jóvenes que trataba de pasar la noche en el kilómetro cero de las carreteras españolas. Asegura que “no representa a nadie” y que no se enteró por las redes sociales de la convocatoria, sino que salió de la facultad, vio las noticias y decidió unirse a la manifestación y a la acampada de anoche: “Tenemos 20 años y aguantamos muy bien”.
Diéguez asegura que no pertenecen a ningún partido, sino que son “un grupo heterogéneo de ciudadanos”. No es el único que pide el cambio político. Kyan, de 19 años, también estudiante, asegura que con el bipartidismo “siempre van a ganar ellos”.
Pero la Puerta del Sol no es el único sitio donde se han congregado activistas del Movimiento del 15-M. En la plaza de Catalunya de Barcelona permanecían esta mañana 20 personas, que habían convocado una asamblea y que han creado tres comisiones (logística, información y comunicación) para organizarse.
La Delegación del Gobierno en Madrid ha advertido hoy a los convocantes de que "la presencia masiva de personas en una concentración debe ir acompañada de personal sanitario y asistencial, así como del dispositivo de seguridad pertinente". Su idea fue siempre regresar a la puerta del Sol, su referente, a combinar la reivindicación con bailes, actuaciones y conciertos. Concentraciones similares, y a la misma hora, se están convocando en diferentes ciudades españolas, a través de las redes sociales.
“Estamos en contra de la política y de la incertidumbre a la que nos ha condenado el neoliberalismo”, critica Tomás Muñoz, periodista en paro de 26 años, uno de los numerosos portavoces oficiales que se fueron turnando durante toda la noche.
Los concentrados han convocado también una asamblea para esta medianoche, donde definirán su posición respecto a las elecciones municipales y autonómicas del próximo domingo. Sus miembros, en principio, no piden el voto para ningún partido pero tampoco llaman a la abstención. Condenan el sistema bipartidista y, aludiendo al lema antiglobalización, claman que “otra política es posible". "Queremos respuestas", gritaba anoche un joven megáfono en mano, desatando los aplausos. Dos grafiteros, mientras tanto, ultimaban la pancarta: "No nos mires. Pregunta. A ti también te afecta".
Tienen tiempo y ganas para protestar. Son universitarios, parados, estudiantes, mileuristas (en el mejor de los casos) y ciudadanos que, de forma anónima, quieren mostrar su apoyo hacia los concentrados. “Nuestro hijo, que es licenciado en Ciencias Políticas y Periodismo, no encuentra trabajo y no hay derecho a ello”, critica un matrimonio de funcionarios de unos 50 años.
La protesta de la Puerta del Sol se desvinculó desde el principio de Democracia Real Ya, que también ha confirmado en un comunicado en su web que, pese que apoya las concentraciones y todo tipo de protesta, no las está organizando.
Los concentrados en la madrugada del lunes encarnaban perfiles como el de Sue, francesa de 22 años, a quien la “solidaridad desplazó a la madrileña Puerta del Sol. Habla cinco idiomas, tiene dos carreras y cursa un master en España. Su única experiencia laboral fue en Holanda, de teleoperadora, por 350 euros al mes. “Veo España muy fragmentada pero sus jóvenes son muy activos”, explica en un perfecto castellano. Desencantada de la política, se mantiene en Madrid gracias a sus padres y lamenta el principio del “voto útil”, que le llevó en las últimas elecciones a decantarse por los socialistas franceses. “Fue una idiotez”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario